«Ella niega con la cabeza. No tiene tiempo para comer con él. Sí, es atractivo, sexy incluso, y no parece estar completamente loco, pero no puede salir con él. Primero de todo, ha decidido no salir más ya que eso nunca le lleva a ninguna parte, por lo menos a nada bueno y, segundo, él le hace sentir demasiadas cosas.». Jill vive por y para el trabajo y no tiene tiempo para nada más, mucho menos para quedar con hombres. En el ascensor del trabajo se encuentra con un misterioso individuo que le pone nerviosa al tiempo que le atrae. …
No importa este calor pegajoso, asfixiante, aplastante, porque hay algo ancentral y fascinante, aunque también misterioso, en este paisaje de arena y templos. El grupo ya ha acabado la excursión, pero como todavía falta un rato para que el autobús vuelva a buscarlos, nuestra protagonista decide seguir la sugerencia de este hombre exótico, (¿será un guía?), de voz profunda y misteriosa, que la acompaña a ver el área secreta, la casa de los espíritus a la que solamente las mujeres tienen permitido el acceso... “… Gimo. Empujo. Arqueo mi espalda observando el techo. Tan oscuro. ¿Dónde estoy? Se siente delicioso. …
«Al principio intentas follarme despacio, pero sigo rogándote más y te cuesta resistir mis ansias. Tal vez sea el alcohol que corre por nuestras venas, tal vez sea nuestro amor, que se hace más fuerte con cada embestida; pero me follas como una diosa, con toda la longitud del consolador, y siento cada centímetro, cada movimiento que haces con las caderas». Isabella y Lilly viven separadas y solo se ven unas pocas semanas al año, pero esas semanas están llenas de ternura, complicidad y… sexo. Llega la Navidad y se reúnen en su cabaña. Entre dulces y velas, se entregan …
«Todo su cuerpo ardía con una pasión voraz, como si el demonio del vicio la consumiera en su interior. Estaba al borde de la implosión». Stéphanie y su amiga Mathilde se disponen a compartir una velada subida de tono. Tras haber probado recientemente las mieles de un actor porno, deciden continuar con su juego sexual y acudir a un club de intercambio. Es la primera vez para Mathilde y Stéphanie la anima a elegir a una mujer como compañera de noche. Cada una a su manera, ¿alcanzarán el séptimo cielo en esta nueva experiencia? La velada libertina es la continuación …
«Él la contempló mientras ella, con los ojos cerrados, se entregaba al éxtasis. Su cuerpo entero, con toda su voluptuosidad, danzaba bellamente ante sus ojos. Era como estar de vuelta en la caravana, jóvenes y recién enamorados. En ese momento, el significado total de su relación se volvió claro para Hugo.» Lisa y Hugo llevan casados muchos años y mantienen una relación sana, aunque ya no disfrutan de la llama ardiente de la juventud. Al mudarse a un nuevo barrio, la pasión desenfrenada que había estado dormida durante años vuelve a despertarse, revelando a través de un sexo increíble que …
«Con tu mano en la parte baja de mi espalda, nos desviamos de la ruta designada, nos separamos del grupo y atravesamos los estantes destrozados. Te detienes justo aquí, en la oscuridad a la que llegamos al salir del espacio con luces parpadeantes provenientes de unas lámparas que cuelgan del techo en ángulos extraños. Me detengo a tu lado. No sé qué esperar a continuación». Mientras Stella hace fila para entrar a la Casa Embrujada, la divisa. Ella es la única persona sin disfraz. En cambio, lleva una camisa, un chaleco y sus labios están pintados de color rojo intenso. …
“El hombre la mira, asombrado al ver lo excitada que está. Se inclina hacia adelante. Intenta de nuevo. Esta vez, ella no puede resistir su lengua áspera extendida que degusta a Cointreau. La succiona como si fuera un chupete.” Hanna y Fredrik siguen explorando sus límites sexuales mientras que también intentan reparar su relación, esta vez en Praga. Una noche un hombre llama la atención de Hanna en un club de striptease y deciden fingir que ella es una prostituta y Frederik su proxeneta. Hanna nunca supo que tener sexo por dinero en efectivo podría ser tan apasionante. Pero el …