«Estoy sentada en el balcón. Miro hacia el mar mientras escribo estas líneas. El manifiesto de una mujer, mi testamento. Una mujer libre. El sol se está ocultando y bebo un café con leche mientras que me pierdo en el horizonte. El aire es cálido y agradable. Una brisa fresca se anuncia. Bebo un sorbo de mi taza. Me acomodo. Una sonrisa satisfecha se dibuja en mi rostro, tan amplia como el mismo sol. Me saco los lentes y la leve brisa me roza. Cierro los ojos por un segundo. Me recuesto. Levanto la mirada. Y sigo aquí. Sigo aquí. …
«En sus brazos ella se siente ínfima y ligera como una pluma Por su parte, pareciera que todo su acondicionamiento físico y cualquier trabajo pesado que ha hecho lo preparó para este momento. Los gemidos de ambos se fusionan con el balido de las ovejas y el zumbido de las abejas. Ella cierra los ojos e inclina la cabeza hacia atrás. Un sonido de puro y absoluto placer escapa de sus labios». Después de ser rechazada una vez de más, Sofia toma una decisión. Encuentra una pareja de ancianos, en línea, que aceptan intercambiar su encantadora cabaña en el bosque …
«Cierro los ojos. Y me transporto a tu océano de sabores. Te beso y te acaricio con mis labios, mi lengua y toda mi energía», pienso. Día de los enamorados. Él planificó este día, tomando en cuenta cada detalle. Para honrarla ella, su maravillosa y hermosa Amanda. Tiene preparado un día entero para brindarle todo lo que se merece. Desayuno en la cama —con café, jugo de naranja y tostadas— que dará paso a una jornada de sexo apasionado y salvaje, con el único propósito de satisfacerla. Y ese es tan sólo es el comienzo de este maravilloso día. Amanda, …
«Me siento mareada y leve como una pluma. Con las manos exploramos nuestros cuerpos y la ropa comienza a caer al piso. Cuando levanto su camiseta y se la saco, noto que no tiene sostén y que los pezones están duros y erectos. Me alejo de su boca para saborearlos, y masajeo sus firmes y pequeños pechos mientras los chupo y mordisqueo con suavidad. Había ansiado esto por tanto tiempo». Es apenas noviembre, pero ya está cayendo la primera nieve. Tova acaba de separarse. Ama la nieve, la Navidad y todo lo que esa época ofrece, pero ¿podrá disfrutarla cuando …
Cuando finalmente se muda a su nuevo departamento, se siente aliviada de haber encontrado un lugar tan agradable y barato para vivir. Pero cuando, a la mañana siguiente, mira por la ventana, nota que el lugar tiene todavía más para ofrecer. En la ventana frente a la de ella, puede ver a una hermosa pareja joven teniendo sexo ardiente y, claramente, no les importa ser observados. Todo lo que falta ahora es una invitación para unírseles. Este relato corto se publica en colaboración con la productora fílmica sueca, Erika Lust. Su intención es representar la naturaleza y diversidad humana a …
«Cuando se abre la puerta del baño, me froto vigorosamente contra el lavamanos, con una mano dentro de mis panties y dos dedos en mi vagina. Sorprendida e increíblemente avergonzada, me giro para ver quién acaba de abrir la puerta que estaba completamente segura de haber cerrado con llave. Es él, por supuesto. Todo alto, desgarbado, esbelto. Y lo más importante, con un bulto palpitante en sus jeans». La protagonista del relato se embarca en un viaje de siete horas en tren. Lo que no sabe, al abordar, es que él estará sentado a su lado. El chico que hace …
Ha pasado un año desde que Elisa empezó a trabajar como camgirl. Conoce a un hombre mayor en línea que promete darle todo lo que pudiera desear a cambio de una sola cosa: su compañía. El verano de Elisa como sugar baby está lleno de cenas elegantes, ropas costosas, viajes y lo más importante: es una extensión de su despertar sexual. Pero cuando Elisa se topa con un antiguo novio, todo llega a un punto de inflexión y se ve obligada a tomar una decisión. Sugar Girl es el segundo relato de la serie sobre Elisa, una mujer joven e …
«La besa con suavidad, al principio, luego tira de su cabello y la obliga a levantar el mentón. Ambos se miran a los ojos. Entonces la vuelve a besar, ésta vez con más avidez. Los dedos de la otra mano se aventuran bajo los misterios de su falda, ascendiendo desde la rodilla derecha. Ella tiembla en sus brazos, pero él la sostiene con fuerza, inmovilizándola». James y Andrea están aburridos de su vida sexual predecible. Ambos sueñan con emociones placenteras, pero nunca han discutido sus fantasías el uno con el otro. En su viaje a París deciden tener una relación …