“Incluso después de llevar juntos tantos años, todavía es capaz de sorprenderme con sus habilidades. No sé cómo puede llegar a convertir una historia de amor en un video pornográfico y volver a enamorarme de nuevo. Es increíble cómo convirtió un momento romántico en un polvo salvaje con un solo toque.” ¿Quién dice que el matrimonio es sinónimo de monotonía? Después de años juntos, los protagonistas de este elegante relato erótico siguen disfrutando de un sexo sensual y salvaje. Esta vez, la pasión nacerá espontáneamente gracias a la dificultad que supone hacer un nudo de corbata y los múltiples usos que esta puede tener en otros contextos que no sean el cuello de un hombre.

"«—Voy a dejar que me cojas ahora, Max. Sé suave, ve lento, haz que dure». Max Campbell está acostumbrado a obtener lo que quiere. Eddie Patterson está acostumbrado a dárselo. Amantes y ex colegas, a Max y Eddie estaban acostumbrados a una caricia robada o una cogida frenética en el baño de la empresa. Eso, hasta que Eddie decidió vender sus acciones y dejar la ciudad. Caliente y harto de masturbarse o tener encuentros fugaces y sin sentido, Max se sube al auto para ir a visitar a su viejo amigo, desesperado por gozárselo. Pero Eddie tiene otros planes. Hará que Max trabaje para ganárselo. Que trabaje duro. Pero con un poco de paciencia, la espera podría valer la pena... " Palabras clave: literatura erótica, sexo, placer, deseo, amor, lgbtq, hombres, paciencia, Julie Jones""«—Voy a dejar que me cojas ahora, Max. Sé suave, ve lento, haz que dure». Max Campbell está acostumbrado a obtener lo que quiere. Eddie Patterson está acostumbrado a dárselo. 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"«Ella lo sabe. Ah, vaya que lo sabe. Carajo. Y entonces ocurre. Su mano baja por un muslo y al llegar al sexo, lo palmea con suavidad. Con la mirada fija en él, con los ojos fijos en los suyos. Un cosquilleo familiar recorre sus partes bajas. Su pene está volviendo a la vida. Con rapidez». Nick no es el tipo de hombre que necesita espiar mujeres para aliviarse. Después de todo, es una estrella de cine sexy que se ha ganado el sobrenombre ‘semental’. Sin embargo, con su vecina no se puede contener. Mientras ella se acaricia su cuerpo suave, él se satisface en secreto y con intensidad. Pero, ¿qué sucede cuando ella lo sorprende...? Este relato erótico encierra toda la pasión y excitación de un acto prohibido.""«Ella lo sabe. Ah, vaya que lo sabe. Carajo. Y entonces ocurre. Su mano baja por un muslo y al llegar al sexo, lo palmea con suavidad. Con la mirada fija en él, con los ojos fijos en los suyos. Un cosquilleo familiar recorre sus partes bajas. Su pene está volviendo a la vida. Con rapidez». Nick no es el tipo de hombre que necesita espiar mujeres para aliviarse. Después de todo, es una estrella de cine sexy que se ha ganado el sobrenombre ‘semental’. Sin embargo, con su vecina no se puede contener. Mientras ella se acaricia su cuerpo suave, él se satisface en secreto y con intensidad. Pero, ¿qué sucede cuando ella lo sorprende...? Este relato erótico encierra toda la pasión y excitación de un acto prohibido.""«Ella lo sabe. Ah, vaya que lo sabe. Carajo. Y entonces ocurre. Su mano baja por un muslo y al llegar al sexo, lo palmea con suavidad. Con la mirada fija en él, con los ojos fijos en los suyos. Un cosquilleo familiar recorre sus partes bajas. Su pene está volviendo a la vida. Con rapidez». Nick no es el tipo de hombre que necesita espiar mujeres para aliviarse. Después de todo, es una estrella de cine sexy que se ha ganado el sobrenombre ‘semental’. Sin embargo, con su vecina no se puede contener. 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«Besó esos labios tan besables. La sensación de la barba de tres días rozando su barbilla cuando movía la cabeza le sobresaltó por una fracción de segundo. No dejaba de sorprenderle que esos suaves y regordetes labios no pertenecieran a una mujer. Tony era un besador excelente y la sensación de labios suaves combinada con una barba rasposa de varios días era sumamente agradable». Tony y Jack llevan años viajando por el mundo como exitosos músicos de rock. Se conocen muy bien. De hecho, se conocen más que bien y en ocasiones, como esa noche, Jack no puede evitar preguntarse qué tipo de relación mantienen realmente. Sabe que no están enamorados. Sabe que son grandes amigos. Y sabe que pasan veladas de sexo verdaderamente alucinantes.